El ballet, un tipo de danza clásica cuyo movimiento se basa en el control absoluto del cuerpo, ha llegado al Teatro Villa Mayor con talleres básicos para principiantes. La Compañía Neodance, liderada por Vaneska Vargas, realizará un ciclo de talleres llamados Paso Clásico que se extenderán hasta noviembre y a los que podrán asistir personas de todas las edades.
“Dar a conocer el ballet y proporcionar los elementos para interesarse en la danza desde el hacer, son los objetivos principales de Paso Clásico”, expresó Vaneska Vargas, quien es bailarina desde niña y desde su llegada a Colombia quiso compartir con otros su entusiasmo por la danza a través de la enseñanza.
El ballet se debe aprender desde temprana edad si se desea hacerlo de manera profesional, pues es una disciplina que requiere concentración y capacidad para el alto esfuerzo; no obstante, implica un sinnúmero de ejercicios corporales que son de mucha ayuda para mejorar la elasticidad, la coordinación, la memoria, la motricidad y el bienestar en general. Estos son los elementos que busca afianzar Paso Clásico.
El diseño de Paso Clásico tiene que ver con la formación del ballet tradicional. “Un bailarín no solo necesita conocer la danza clásica, debe incorporar jornadas completas de estiramiento, acondicionamiento físico, formación musical y otros elementos fundamentales para convertirse en un bailarín competitivo”, dijo Vaneska. “Los talleres en el Teatro Villa Mayor, no requieren un conocimiento previo, solo ganas de moverse un poco”.
Formar a un bailarín requiere al menos dos horas diarias de entrenamiento cinco días a la semana. Paso Clásico no busca llegar a este nivel, simplemente proporcionar un espacio de acercamiento a la danza en que los adultos pueden mejorar su condición física y los niños pueden iniciar un proceso artístico.
Vaneska Vargas, la joven maestra
Vaneska nació siendo toda una atleta. A los cinco años comenzó a hacer gimnasia rítmica y pronto se convirtió en una competidora de alto rendimiento. A los 12 años ya representaba a su natal Venezuela en diferentes certámenes, pero lesiones en ambas rodillas detuvieron su camino como gimnasta.
Natación o Ballet, fueron las sugerencias del doctor para fortalecer los músculos cercanos a la rodilla, Vaneska se decidió por la segunda y ese fue el inicio de una carrera que se ha fortalecido con su migración a Colombia.
Vaneska llegó a Bogotá en 2016. Con 15 años y muchas ganas de seguir bailando, Vaneska se animó a presentar audición en la academia de ballet Anna Pavlova, donde salió favorecida con una beca, igual que su hermana Angela, quien le sigue los pasos en el ballet.
“Cuando estaba en Venezuela tomaba la danza como un hobby, me gustaba mucho pero no imaginaba un futuro profesional. Llegar a Colombia me amplió mucho la perspectiva, comencé a bailar con personas mayores que yo y esto me hizo madurar en muchos aspectos porque convivía con adultos todo el tiempo”, reveló Vaneska. “Tan pronto como me decidí definitivamente por la danza las puertas comenzaron a abrirse”.
La ópera prima
La llegada de Vaneska al Teatro Villa Mayor fue una pura casualidad, producto de andar el barrio y sentirlo propio. Ya tenía en mente un montaje de ballet y al pasar frente al Teatro quiso acercarse a preguntar opciones.
“Tener el Teatro Villa Mayor cerca es una ventaja y un lujo grandísimo que debemos aprovechar todos los que vivimos en el sector. Es la posibilidad de vivir el arte de primera mano, como un plan cotidiano, sobre todo porque todas sus actividades son de entrada libre”, expresó Vaneska, quien también es una asidua asistente a las funciones del Teatro. “Por mi parte, tengo muchas ganas de devolver todo lo que he aprendido y me alegra mucho saber que ya hemos conformado un grupo que se mantiene entusiasmado con los talleres”.
A su corta edad, Vaneska ha comprendido que iniciar cualquier proyecto seriamente requiere un compromiso. Hasta hace un año tenía muchas complicaciones porque todavía estaba en el colegio y no podía disponer plenamente del tiempo para bailar.
“Sentía que debía trabajar el doble para tener buenas calificaciones y que me permitieran salir fácilmente en ocasiones especiales”, explicó Vaneska. “Pero con la orientación de maestra Ana Consuelo Gómez y el maestro Jaime Díaz de la academia entendí que, si uno se propone grandes cosas y está enfocado en un objetivo específico, con disciplina puede lograrlo”.
Vaneska está preparando su ópera prima Se rompió el último sello, una obra de ballet que habla de la importancia de la familia para evitar la destrucción de la sociedad. El montaje incorpora a siete bailarines y cuatro músicos en escena. Todos ellos ensayan en el escenario del Teatro Villa Mayor en horarios matutinos a cambio de los talleres.
“La gente cree que ser bailarina es bailar nada más, pero también es crear, enseñar, asumir el teatro como tu casa, el escenario es el lugar favorito porque es donde podemos expresarnos libremente”, dijo Vaneska. “Me gustaría que muchas más personas desarrollaran esa sensibilidad del artista, que se enamoraran de la danza como yo lo hice y que hicieran del teatro su casa”.
